Situación actual de las cadenas de suministro en México
Gabriel Rosales, director general y fundador de B2B Negocios
La cadena de suministro es una red comercial compleja de oferta y demanda de materiales, información, recursos y personas que se coordinan para conseguir materias primas, transformarlas en productos, distribuirlas y venderlas al consumidor final. Su valor global alcanzó los 16 000 millones de dólares en 2020 y, en la última década el mercado del software para su gestión se expandió más de dos veces.
Cuando fueron creadas tras la revolución industrial, las cadenas de suministro tenían como premisas aumentar la eficiencia y reducir los costos. La tecnología y el internet han introducido un nuevo jugador: el cliente.
Hoy en día es común diseñar y establecer prioridades con el objetivo de satisfacer mejor y más rápido a los compradores finales. Los factores para lograr el éxito son la planeación, información y operación, antes, durante y después de entregar el pedido.
Mucho se ha discutido sobre la disrupción de las cadenas de suministro en tiempos de Covid o tras los efectos de la guerra entre Rusia y Ucrania.
De acuerdo con la consultora McKinsey, las interrupciones de la cadena de suministro de más de 30 días pueden ocurrir en promedio cada 3.7 años y le cuestan a la empresa 45 % de las ganancias de un año en el transcurso de una década.
En este contexto, las compras corporativas son clave porque disminuyen impactos por disrupciones o cambios en el ambiente de negocios para controlar costos. Su función es garantizar que el abasto de productos y servicios se dé en las mejores condiciones posibles. Trabajan de la mano con los gestores de la cadena de suministro para entregar sus productos al cliente a tiempo, en forma y de manera rentable.
Disrupciones en la cadena de suministro
En la región México, Estados Unidos y Canadá se presentaron importantes disrupciones provocadas por la pandemia, pero hoy en día, ya han comenzado a regularizarse. El sector automotriz está en franco proceso de recuperación, así como la industria farmacéutica.
La cuarta revolución industrial o la industria 4.0 se caracteriza por su alto componente tecnológico. La automatización de tareas repetitivas, el aprendizaje de máquinas y la inteligencia artificial apoyan a las cadenas de suministro para ser más ágiles. Ya sea automatizando procesos de servicio a cliente o, desarrollando modelos predictivos de comportamiento a través de IA, se logra la preferencia y lealtad del consumidor.
El uso de tecnología en el área de compras corporativas impacta de forma significativa a la cadena de suministro y reduce tareas repetitivas como identificación de proveedores, confirmación de pedidos y tiempos de entrega. Por ejemplo, una conocida empresa de mensajería logró reducir el costo por transacción de 500 a solo 90 pesos, simplemente al digitalizar procesos clave.
En ese sentido, la profesionalización del área de compras es prioritaria. Ya existen plataformas como Supplynity, CPO net y la Asociación de Profesionales en Compras Abastecimiento y Logística que se dedican a la capacitación y el networking en este rubro.
Situación actual de cadenas de suministro en nuestro país
La situación actual de las cadenas de suministro varía de acuerdo a cada región del país. Es común la expresión “existen muchos Méxicos” en referencia a las diferencias de desarrollo regional entre el norte del país, el centro (Bajío) y el sur. En este sentido, es fundamental identificar con precisión las ventajas competitivas que brinda cada zona y saber aprovecharlas: por ejemplo, los estados del norte del país están bien integrados a Estados Unidos y Canadá, mientras que el sur se verá beneficiado, en el mediano plazo, con la construcción del ferrocarril transístmico.
Oportunidades del nearshoring
El nearshoring representa una buena oportunidad para aquellas empresas que logren integrarse a la cadena de suministro de las compañías que se establezcan en territorio mexicano. Habrán de igualar procesos y demostrar que son mejores proveedores que sus competidores en Asia.
Todavía existen retos a resolver, como una mayor apertura en cuanto a generación y distribución de electricidad y modernización de infraestructura para lograr que la relocalización, sea. de verdad, el punto de inflexión en la recuperación de la economía nacional.
