Cultura logística, el primer paso para potenciar la relocalización
En su estudio sobre nearshoring, el IMT y la SICT proponen crear el sistema nacional de innovación en logística que favorezcan el diseño e implementación de programas de formación, certificación y capacitación de personal en logística.
Ante el crecimiento de empresas que buscan relocalizar sus procesos de producción en México, el desarrollo de una cultura logística es crucial para mejorar el desempeño general y la competitividad del sector logístico de un país. Es, además, uno de los primeros pasos emprendidos por los países con interés en impulsar su potencial económico como Japón, Corea del Sur, China, entre otros.
Lo anterior es parte del estudio Consideraciones para fortalecer al sistema de transporte frente al nearshoring 2024, realizado por la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) y el Instituto Mexicano del Transporte (IMT). En esta treceava nota presentamos los beneficios que traería establecer una cultura logística en México y qué se debería mejorar para elevar la competitividad del país, según la visión de los investigadores.
“En general, desarrollar una cultura logística sólida es esencial para fomentar la innovación, el profesionalismo, la colaboración, la orientación al cliente, la sostenibilidad y la responsabilidad social en el sector logístico, impulsando la mejora continua y mejorando el rendimiento general y la competitividad de los sistemas logísticos nacionales”, señaló el estudio.
El IMT destacó que la creación de una cultura logística puede fortalecer aspectos estratégicos como:
- Eficiencia y productividad: enfatiza la importancia de la fluidez, eficiencia, productividad y mejora continua en las operaciones en general. Infunde la mentalidad para optimizar procesos, minimizar el desperdicio y maximizar la utilización de recursos, lo que genera ahorros de costos, tiempos de entrega más rápidos y una mayor satisfacción del cliente.
- Innovación y adopción de tecnología: fomenta la innovación y la adopción de nuevas tecnologías y mejores prácticas en la gestión logística. Promueve la inversión en automatización, digitalización y análisis avanzado para agilizar las operaciones, mejorar la visibilidad y la toma de decisiones, impulsando la innovación y la competitividad en el sector logístico.
- Profesionalismo y desarrollo de habilidades: resalta la importancia del profesionalismo, el desarrollo de habilidades y la capacitación en la fuerza laboral logística. Difunde la contratación, retención y desarrollo de personal capacitado con experiencia en áreas como gestión de la cadena de suministro, planificación del transporte y control de inventario, mejorando la competencia general y el profesionalismo de la fuerza laboral de logística.
- Colaboración y asociación: promueve la colaboración y la asociación entre las partes interesadas en el ecosistema logístico, incluidas agencias gubernamentales, empresas, instituciones académicas y organizaciones de la sociedad civil.
- Enfoque al cliente y excelencia en el servicio: prioriza el enfoque en el consumidor y la excelencia en el servicio, reconociendo la importancia de satisfacer las necesidades del cliente y superar las expectativas en la prestación de servicios logísticos. Además, enfatiza la capacidad de respuesta, la confiabilidad y la flexibilidad para satisfacer los requisitos cambiantes de los compradores, generar confianza, lealtad y relaciones a largo plazo y mejorar la reputación general y la competitividad del sector logístico.
- Sostenibilidad y responsabilidad social: impulsa la sostenibilidad y la responsabilidad social en las operaciones logísticas, reconociendo los impactos ambientales, sociales y éticos de las actividades logísticas. Alienta la adopción de prácticas sostenibles, como la reducción de emisiones, la minimización de residuos y el abastecimiento ético, para minimizar las externalidades negativas y contribuir a los objetivos de desarrollo sostenible, mejorando la reputación general y la resiliencia del sector logístico.
Propuestas
En este contexto, el estudio planteó diversas acciones que se deben emprender en México desde el ámbito empresarial, académico y administrativo con el objetivo de impulsar la industria logística y tener más y mejores herramientas para hacerle frente a la demanda que trae el nearshoring.
Una de sus propuestas es crear el sistema nacional de innovación en logística, el cual consiste en diseñar una red de sistemas regionales interconectados entre sí, para la coordinación entre organismos públicos, empresas y academia que favorezcan el diseño e implementación de programas de formación, certificación y capacitación de personal en logística.
“La falta de capacidad de los tomadores de decisiones operando en el sector, como la escasez de personal operativo calificado, está actualmente generando importantes sobre costos logísticos”, apuntó el IMT.
El estudio resaltó que en el país hace falta promover “Living Labs” para una adopción tecnológica rápida y fluida. Es decir, fomentar la adopción de tecnologías avanzadas dentro de las industrias para incrementar la productividad, a través del enfoque de “Pruebas de concepto” en “tiempo real”. Hoy existe un “Living Lab” de logística urbana desarrollado por el IMT.
A nivel académico, la investigación consideró que es fundamental desarrollar y actualizar programas universitarios para garantizar que se ajusten con las habilidades y conocimientos que necesitan las industrias involucradas en la relocalización y colaborar con líderes de la industria para comprender las tendencias y requisitos actuales, adaptando los planes de estudio en consecuencia.
También se sugirió facilitar proyectos de investigación colaborativos entre investigadores académicos y socios de la industria para abordar los desafíos y fomentar la innovación. Para ello, se aconseja la creación de institutos de ingeniería que colaboren para el desarrollo de soluciones de investigación aplicada en temas de transporte y logística.
“Se podría impulsar la creación de una red a lo largo del Corredor 57 (Ciudad de México, Querétaro, San Luis Potosí, Monterrey, Nuevo Laredo). En consecuencia, la creación de un Instituto de Ingeniería en la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), así como en la Universidad Autónoma de Tamaulipas, Campus Nuevo Laredo complementaría el trabajo que actualmente desarrolla el Instituto de ingeniería de la UNAM (Ciudad de México), el Instituto Mexicano del Transporte (Querétaro) y la Universidad Autónoma de Nuevo León (San Nicolás de los Garza, N.L.)”, indicó el IMT.
En lo que compete al sector empresarial, el IMT y la SICT propusieron crear, entre las asociaciones mexicanas de logística y cadena de suministro e instituciones académicas, oportunidades de aprendizaje continuo con reconocimiento nacional e internacional, como cursos y certificaciones de desarrollo profesional, para ayudar a las personas que ya forman parte de la fuerza laboral, a mejorar sus habilidades.
Como parte del proceso de aprendizaje, el estudio consideró necesario incentivar el desarrollo de conferencias y foros sobre la importancia del nearshoring, los cuales reúnan a instituciones académicas, estudiantes y empresas involucradas a fin de facilitar la colaboración, intercambio de conocimientos y construcción de relaciones.
El IMT también propuso apoyar el desarrollo alianzas globales a través de redes internacionales de instituciones académicas y de empresas entre países de América del Norte.
“Un ejemplo es la Alianza de Clústeres de Cadenas de Suministro de América del Norte, que actualmente agrupa a los clústeres de logística de San Luis Potosí, de Querétaro y de Tamaulipas. Además de facilitar programas de intercambio de estudiantes en transporte y logística, de estancias de investigación conjunta y colaboraciones de profesores para mejorar la interoperabilidad de los sistemas de logística en América del Norte”.
En la industria del transporte, los investigadores del IMT se pronunciaron por el impulso, junto con el sector privado, de una red de escuelas para la formación de operadores del autotransporte, debido a que “la creciente escasez de operadores capacitados está frenando la expansión de las empresas de autotransporte de carga, con lo que se ejerce una importante presión en los precios de los servicios. Esto será una limitante fuerte para que se mantenga la competitividad de México frente al nearshoring”, expuso la investigación.
Finalmente, el IMT consideró desarrollar una red de Institutos Tecnológicos de Logística y Transporte a través de al menos cinco campus (uno para dar servicio a cada región del país), cuyo papel sería impulsar las formaciones especializadas en el área del transporte y la logística. Es importante la certificación de competencias profesionales en tareas como:
- almacenista,
- montacarguista,
- operadores de los diferentes vehículos de transporte y
- especialidades y maestrías para tomadores de decisiones en el sector.
Escasez de talento logístico, reto de México para la relocalización