IA el camino más corto a la logística verde
El transporte es el segundo sector que genera más emisiones de CO2 a nivel mundial (más del 14% de las emisiones totales).
El transporte es el segundo sector que genera más emisiones de CO2 en el mundo (más del 14 % de las emisiones totales), de las cuales casi el 30 % proviene del transporte terrestre de carga.
Así lo señaló Katherina Lacey, cofundadora y directora de Producto de Quincus, quien agregó que “para satisfacer la demanda de un mercado tan ágil, se requiere incorporar tecnologías como la inteligencia artificial en logística que mejoren la eficiencia operativa y reduzca costos. Sin embargo, uno de los mayores beneficios que pasa desapercibido es la reducción del impacto ambiental. La optimización de rutas y carga de los transportes es fundamental para cumplir con las promesas de velocidad, eficiencia y confiabilidad mientras se promueve un desarrollo sustentable en logística”.
El impacto ambiental de la entrega rápida
Katherina Lacey informó que en algunas zonas metropolitanas, como la del Valle de México, los vehículos pueden llegar a generar hasta el 60 % de la contaminación total por partículas suspendidas, por lo que es fundamental que todos los participantes en la industria logística diseñen redes e infraestructuras para una cadena de suministro sostenible.
Indicó que “en Quincus, contamos con tecnología que incorpora la sostenibilidad en todos los procesos logísticos:
- la selección de mejores rutas,
- verificación de direcciones,
- reducción de recursos y,
- promover operaciones más eficientes para una cadena de suministro inteligente y sostenible”.
Por otra parte, destacó que “uno de los caminos para la reducción de las emisiones es adaptar los vehículos de forma gradual hacia energías renovables, como los eléctricos; sin embargo, tecnologías como la inteligencia artificial aplicada en logística también puede ayudar a impulsar la sostenibilidad en la cadena de suministro, ya que la digitalización de las operaciones reduce la huella de carbono al minimizar el uso de combustible, optimizar las rutas de entrega, reducir el kilometraje; y consolidando la capacidad de carga y los envíos para realizar menos viajes”.
Finalmene, dijo que se pueden seleccionar transportes óptimos para una máxima capacidad y realizar viajes más cortos, minimizando el tiempo que pasan los vehículos en el tránsito. “Con estas pequeñas acciones se puede reducir hasta un 70 % la distancia que recorren los vehículos de entrega, protegiendo al medio ambiente de más de 4 000 kilogramos de CO2 diariamente”, concluyó.