Fábricas inteligentes: el impulso que genera el nearshoring
Un ejemplo de ese tipo de migración es la recién anunciada gigafábrica de Tesla, que se construirá en Nuevo León.
Como resultado del nearshoring, las fábricas inteligentes que están migrando a México llegan con procesos basados en tecnología que incrementan la necesidad de contar con software especializado. Así lo demuestra el anuncio de la llegada de la gigafábrica de Tesla, que se construirá en Nuevo León.
Al respecto, Morgan Stanley señala en un reporte que dicha planta es el primer paso de la “segunda ola” de nearshoring que estará comandada por empresas del sector automotriz, que representan el 30 % de todas las exportaciones nacionales.
“Debemos entender las fábricas inteligentes como aquellas plantas productivas que cuentan con diversos sistemas o tecnologías digitales que interactúan entre sí en los procesos de manufactura, o de manera externa con sistemas de terceros”, indicó Jorge García, analista principal de BI y Gestión de Datos en Technology Evaluation Centers.
Explicó que se trata de “fábricas en cuyos procesos interactúan la maquinaria, el software empresarial y los colaboradores para generar total transparencia en todos los puntos de la operación”.
Según el analista, “ese tipo de operaciones inteligentes generan datos que se analizan para predecir anomalías, saber en qué momentos se requiere mantenimiento de la maquinaria, e incluso para recolectar información sobre el uso que los clientes dan al producto una vez vendido y saber qué mejoras se pueden hacer a esa mercancía”.
Uno de los procesos “inteligentes” de estas fábricas es la capacidad de monitorear el nivel de desperdicio de insumos dentro de la producción. Con base en los datos generados, un software ayuda a los operadores a analizar y corregir el proceso para que se reduzca la merma, creando considerables ahorros.
El segundo proceso es el monitoreo del almacén. Los datos precisos sobre los materiales y productos en existencia permiten reducir considerablemente el número de artículos defectuosos y detectar aquellos patrones que generan esos defectos, permitiendo tomar acción para repararlos.
Jorge García señaló que “las empresas requieren gestionar todos esos procesos desde un ERP, que es un software empresarial que permite la gestión y planificación de recursos de manera eficiente. La adquisición de este tipo de software no puede hacerse a la ligera y, por el contrario, requiere de una evaluación previa apoyada por una compañía especializada e imparcial que presente las características y funcionalidades de las soluciones ofrecidas por diversos fabricantes y ayude a elegir la que mejor se adapte a las necesidades de la empresa”.
Concluyó que “ la transformación digital y la implementación de tecnología para la creación de fábricas inteligentes es una realidad en México que se ve impulsada por la llegada de más compañías internacionales a diversas zonas del país. Sumarse a esa ola es clave para mantener la competitividad y generar un crecimiento del sector manufacturero, apalancado por la digitalización”.